SOBRE LA DIÁSTASIS ABDOMINAL - Nacho Varela
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SOBRE LA DIÁSTASIS ABDOMINAL

En el siguiente post hablaré de forma sencilla sobre la diástasis abdominal, con el fin de ayudar a todas esas personas que la sufren.

 

¿QUÉ ES LA DIÁSTASIS ABDOMINAL?

 

Es la separación excesiva de nuestros rectos abdominales (parte izda y parte derecha) que es la musculatura superficial del abdomen. Como resultado se produce un ensanchamiento de la linea alba y aparece una protusión del contenido intraabdominal cuando hacemos una contracción de la musculatura.

 

 

 

¿POR QUÉ APARECE? FACTORES DE RIESGO

 

Los factores más determinantes para que aparezca son el embarazo, la obesidad y una carga de trabajo excesiva en esta zona.

Durante el embarazo se produce una distensión de toda la musculatura abdominal para dar espacio al feto. Además hay un cambio hormonal que transforma el tejido conectivo dotándolo de más elasticidad.  El 66% de las mujeres tiene diástasis de rectos en el tercer trimestre del embarazo.

Las personas con sobrepeso tienen también posibilidades de tener diástasis abdominal, ya que el exceso de tensión al que se ve sometida la musculatura hace que esta pueda ceder produciéndose el daño en la linea alba.

Por último, si tenemos malos hábitos posturales a la hora de trabajar esta musculatura, no elegimos los ejercicios adecuados y además los llevamos al límite de carga, es posible que también pueda aparecer este problema.

 

MODOS DE OBSERVACIÓN

 

Podemos observar si tenemos diástasis abdominal haciendo una contracción de la musculatura del abdomen, tanto decúbito supino como haciendo plancha en prono. Sin embargo, la forma más fiable de realizar un diagnóstico es la ecografía. La diástasis abdominal puede aparecer en todo el recorrido de la linea alba y puede tener mayor o menor tamaño en función de la superficie de tejido dañado.

 

PROBLEMAS LUMBARES DERIVADOS

 

La musculatura abdominal superficial y profunda y toda la faja conocida como CORE, son muy importantes a la hora de mantener la estabilidad postural de nuestra columna lumbar. Si esta musculatura está débil o alterada, la columna lumbar tendrá que soportar las cargas sin la ayuda de esta faja. Esto puede derivar en problemas de tipo inflamatorio que cursen con dolor o en lesiones más complicadas como las hernias discales.

 

 

 

¿CÓMO PODEMOS ACTUAR SOBRE LA DIÁSTASIS ABDOMINAL?

 

En primer lugar hay que decir que la recuperación completa de esta lesión es muchas veces complicada. Pero sí podemos hacer que la linea de tensegridad que une los dos rectos del abdomen sea lo más competente posible y reducir al máximo este problema. El éxito dependerá de la separación que hayan alcanzado los rectos, de la capacidad y persistencia de cada uno para trabajar sobre la lesión y también de los hábitos posturales y alimenticios de la persona.

Algunos consejos importantes para mejorar la diástasis son:

  1. Olvídate de los abdominales tradicionales: con estos ejercicios solo conseguirás aumentar más esta diástasis y dañar también a tu suelo pélvico, que normalmente aparece también debilitado en procesos de este tipo.
  2. Tonifica el músculo transverso del abdomen: el trabajo sobre este músculo hará que tu tejido intraabdominal no pueda protuirse tanto hacia fuera.
  3. Evita hacer cosas que generen presión abdominal: en esto podemos incluir fuerza excesiva a la hora de defecar (hábitos que eviten estreñimiento) , cargar pesos excesivos o levantarte de la cama rápidamente sin haberte puesto de lado.
  4. Practica hipopresivos: estos ejercicios favorecerán que tu linea de tensegridad vuelva a ser recuperar funcionalidad y además trabajarás tu suelo pélvico.
  5. Fajas específicas para diástasis: existen fajas de uso diario que tienen como función aproximar tus rectos del abdomen para reducir la diástasis y que cicatrice el tejido dañado, que en ocasiones dan buenos resultados. Sin embargo es necesario hacer todo el trabajo antes mencionado para que el tratamiento sea efectivo.
  6. Cirugía: sólo está indicada para casos severos en los que no ha sido posible la reducción de la diástasis después de meses de tratamiento con el especialista, existe dolor y/o puede haber problemas de hernias o disfunciones en la columna vertebral. En este caso será imprescindible también un tratamiento previo para que la musculatura llegue a la operación lo mejor posible y posteriormente para trabajar sobre ella y que la diástasis no vuelva a aparecer.

 

Como siempre, lo imprescindible es implicarse, ser responsable, cuidarse, ponerse en buenas manos y tener paciencia.